El expiloto de Top Gear Ben Collins ha descendido una de las montañas más peligrosas de los Alpes suizos: la colina del infierno. Y por si esto no significara un reto suficientemente grande, lo ha hecho al volante de un Range Rover Sport a más de 150 quilómetros por hora.
Se trata de un spot que la marca está preparando con el antiguo The Stig como protagonista, el que también fue piloto de Nascar y Fórmula 3 se enfrenta a casi 15 quilómetros de bajada, con rampas de hasta un 75% de desnivel. En esta ladera, ubicada en la localidad suiza de Mürren, se disputa cada año una de las pruebas de descenso en esquí más famosas de Europa.
Este reto realizado con el Range Rover Sport, con un motor V8 de 510 caballos, demuestra de lo que es capaz uno de los modelos más destacados de la marca británica. Collins, al volante de este todoterreno de 2.300 kilos, necesitó 21 minutos y 36 segundos en recorrer un camino que ya estaba cubierto por las primeras nieves del invierno, así como de rocas, barro y hielo.
Además de unos neumáticos de alta resistencia y de una jaula antivuelco instalada por seguridad, el Range Rover Sport no contó con ninguna otra mejora. Si con los 510CV de potencia de motor que lleva de serie ya ha conseguido una hazaña así, imaginaos después de un poco de chiptuning.
Un SUV más urbano, de Land Rover, que potenciamos en Car-tec es el Range Rover Evoque. Con 150 caballos de serie, conseguimos alcanzar 204.1CV y 434NM de par motor. Puede que nunca se os ocurra descender la colina del infierno con un coche así, pero os animamos a que vengáis a reprogramarlo porque os hará muy felices.
