Ya os contamos hace unos meses que los Porsche 911 iban a dar muchas alegrías a sus propietarios.
Ahora os contamos al detalle el cambio que Porsche ha establecido en los modelos 991 y las consecuencias positivas que tiene. Una reprogramación de Porsche 991 que hará las delicias de todos sus dueños.
Porsche es una de las marcas que ha demostrado que la eficiencia volumétrica se puede optimizar hasta unos niveles extraordinarios creando máquinas que superan el 100% ( cilindrada / cv) en los motores atmosféricos; no obstante después de muchos años realizando versiones sobrealimentadas ven el futuro «eficiente» implementando el turbo en los motores más pequeños de los Porsche Carrera y Boxter.
En los últimos años hemos visto cómo los motores del carrera o GT3 mejoraban mediante sistemas de distribución variable, admisión variable, inyección directa, pero en algún momento la física pone punto y final.
La única solución para mantener la carrocería de un 911 de 4 plazas útiles sin tener que modificarla por las dimensiones del motor es añadirle un turbo al motor.
Un motor que dispone en este caso de 2 turbocompresores capaces de comprimir un volumen de aire para generar más de 500CV de potencia.
Turbos pequeños para contener los pesos y de una aleación excelente en cuanto a disipación de temperatura. Simplemente un modelo «básico» muy mejorado respecto al modelo anterior. En los ojos de mas de un purista quizá el mito haya llegado a su fin, pero en ningún momento es así.
Nuevos motores y mejor reprogramación
EVOLUCIÓN es la palabra. Creando un concepto antiguo de otra forma, con el fin de divertir, transmitir emociones y antetodo mejorar la seguridad de los conductores o conductoras que se han decidido por el.
Este nuevo modelo de 911 no solo es un salto para la marca sino para el chiptuning también.
En los anteriores modelos atmosféricos con la reprogramación de centralita podíamos ofrecer rendimientos mejorados que nos hacían bajarnos del 911 con una sonrisa y un cosquilleo en la barriga que pocos otros vehículos podrían transmitirnos. Ahora las ganancias han cambiado, han cambiado en el buen sentido, o quizá en el mejor sentido: una buena base para optimizar. Con una simple reprogramación mejorada respetando todos los sistemas de seguridad de la gestión de motor (continental SDI 21) conseguimos ganancias que superan los 100CV adicionales y un par motor que te pega al asiento como no hacía antes tu coche.
