El cerebro de un coche es la centralita. Hoy en día la electrónica de un motor nos ofrece un amplio abanico de posibilidades y reajustes que nos permiten “personalizar” nuestro coche. La electrónica ha tomado un papel muy importante en todos los coches nuevos. Mientras que unos años atrás únicamente imperaba la parte mecánica.
¿Qué gestiona una unidad de motor?
Las centralitas de motor (ECU) gestionan un sinfín de datos e información gracias a una placa de circuitos integrados y diversos componentes electrónicos. Y los cuatro grandes dominios de la electrónica de los coches son: seguridad, confort, comunicación y grupo motopropulsor. La centralita en cuestión gestiona los distintos aspectos de la combustión interna del motor. Además, controla las revoluciones, el régimen de ralentí, interpreta señales de entrada y de salida a la centralita y controla la respuesta del acelerador, entre otras.
Son tantos los aspectos que se controlan desde la ECU, que modificando los diferentes valores se pueden conseguir diferentes resultados. Por ejemplo, reducir el consumo de combustible, programar pops & bangs, anular el start-stop, etc. Para realizar los diferentes ajustes siempre se tiene que tener en cuenta el tipo de motor y de centralita.
¿Qué ajustes se pueden realizar a través de la centralita?
- Ecotuning: Consiste en una reprogramación de motor enfocada a la reducción de consumo. Se centra en conseguir un aumento de par motor a bajas y medias revoluciones, consiguiendo una mayor eficiencia en la conducción. Los coches que se benefician más de esta electrónica son los diésel (ya de por sí tienen un mayor par motor) y los TSI. Este tipo de reprogramación se suele hacer en furgonetas de reparto, comerciales y taxistas, o cualquiera que haga muchos kilómetros por autopista.
- Pops & bangs: Es el resultado de una variación de factores como fuel-cut y avance de encendido con el que se consigue un cambio el sonido del coche al soltar el gas y retenciones. Este tipo de configuración ya la incorporan de serie algunos superdeportivos. Algunos ejemplos en los que suele funcionar este tipo de ajuste en la centralita son los motores gasolina TSI y TFSI (Golf GTI, Golf R, Cupra, Audi S y RS, Type R, BMW 28i, 35i y M4 entre otros).
- Launch control: Este tipo de reajuste permite fijar el coche a un número de rpm concreto para mejorar la salida desde cero del coche.
- Motor y caja de cambios: En todos los VAG con cambio DSG y S-Tronic es recomendable reprogramar la caja de cambios para ajustarla a los nuevos valores de par motor (por ejemplo Golf R, GTI, Audi RS3…) y también los diesel. En BMW es necesario ajustar la caja de cambios en los nuevos modelos, si bien no es necesario en todos. Únicamente en aquellos cuya caja de cambios tenga una limitación de par motor por debajo de los nuevos valores conseguidos con la reprogramación de motor y nunca llegando al límite físico de la caja de cambios.
- Anular start-stop: El sistema start-stop apaga el motor cuando está en ralentí y lo vuelve a accionar cuando se pisa el embrague. La anulación de este sistema se puede hacer en algunos modelos, como por ejemplo el Honda Civic Type R, el Mercedes Clase A o los grupo VAG.
